viernes, 26 de noviembre de 2021

Jadue se refirió a los votantes de Parisi como “individualistas y con poca consciencia de clase”, apuntando al perfil del trabajador de la zona minera. Tras estos dichos, Parisi se defendió, diciéndole que, si tenía problemas con Boric porque la derecha le ayudó a ganar las primarias, mejor que peleara con él, pero que no se metiera con la gente del PDG ni con los trabajadores del norte. No faltó mucho para que Jadue le respondiera, aunque, para sorpresa de todos, lo hizo con el afán de pedir disculpas y reconocer su error luego de faltarle el respeto a los votantes de Parisi. Al trascender la noticia, el propio Boric dio un paso al costado para desmarcarse de los dichos de Jadue, y aprovechó la instancia para llamar a la “unidad nacional”. Tal parece que la estrategia del candidato, en esta coyuntura, no puede ser la división ni la confrontación con las otras fuerzas políticas, y en eso Boric tuvo que ser asertivo. No es muy inteligente generar rencillas, porque eso le puede favorecer a Kast, sobre todo, y considerando que muchos votantes de Parisi pueden perfectamente marcar por él, si se hace mal la pega. En este punto, aquellos votantes pueden hacer la diferencia y torcer los resultados. De todos modos, no hay que ser muy ducho para captar que no se trata de un apoyo genuino al proyecto del PDG. No nos contemos la suerte entre gitanos. Este llamado a la “unidad” es solo otra estrategia electoral, como muchas de las tantas volteretas que se dieron y se seguirán dando en el escenario político, con el fin de “moderar” el discurso lo más posible y convocar alianzas artificiales en lo que dure la noble carrera por la democracia. Políticamente, en estos momentos, todo vale, incluso la mentira, sobre todo, la mentira, porque el cinismo y el doble estándar puede que no sea solo patrimonio de nuestros representantes, sino que parte de nuestro ethos más profundo. Sombras de Maquiavelo, más vivas que nunca. Estás conmigo o no lo estás. Me sirves, o eres de los otros. La política misma, su animalidad más bestia, se debate, siempre, entre estas dos fórmulas.
Primer relato: Comunismo vs Capitalismo

Segundo relato: Socialdemocracia progresista vs Neoliberalismo conservador

Tercer relato: Globalismo de izquierda vs Soberanismo de derecha

Cuarto relato: Globalismo corporativo (tanto de izquierda como de derecha)

Escoja usted su relato preferido.
A la larga, querida, ganará quien imponga su relato y haga de su narrativa la verdad.