sábado, 27 de junio de 2015



La mirada clínica, siempre moralista, reformista, calculadora, queriendo forzar algo a seguir determinado orden o regla.... En cambio la mirada poética, siempre única, diversa, propiciando la existencia de la excepción, siguiendo un orden particular, abrazando la nota discordante, el desvío del temperamento general.