lunes, 14 de marzo de 2022

Hay quienes necesitan crear un enemigo, un monstruo, para proyectar su propia miseria interior.
"Cada entrada se titula con una palabra. Veamos una de las mejores: "Imbéciles". No es novedad afirmar que Savater se distingue también como maestro de lecturas. Sugiere en este capítulo La imbecilidad es cosa seria de Maurizio Ferraris, donde se define dicha enfermedad endémica de nuestra especie de la siguiente manera: "Ceguera, indiferencia, hostilidad a los valores cognitivos, más extendida entre quienes tienen ambiciones intelectuales". La descripción es perfecta, ¿verdad? ¿No encontramos hoy entre la intelectualidad argentina la colección más peligrosa de imbéciles?

Como si se tratase de perlas negras, la recopilación periodística va engarzando a los imbéciles más peligrosos de nuestro tiempo: los fanáticos de la identidad, de la corrección política y de tratar a los animales como humanos (y viceversa); los separatistas catalanes y vascos; los nihilistas blancos; los enemigos de la Constitución; los que celebran a los terroristas como héroes populares; los progres que creen tener el monopolio de la virtud; los extremistas, en especial los Viejos Revolucionarios.