martes, 2 de septiembre de 2008

"Game over"





El enigma de la tierra caseosa

Otra premonición ha aterrizado
En forma de rayo interrogante,
En algún espacio de lo intangible,
En la inestabilidad de la Tierra Caseosa.

Un arrebato natural marca líquidamente
las cabezas de los llamados elegidos.
Una ceremonia se ha hecho presente.

Dios Casio, su tótem predilecto, dice:
“El receptor de los agujeros negros de nuestro mundo
nos abrirá la mente”.

Casio reflexiona sobre el juicio sin demasiadas pruebas,
la premonición ya es un hecho.

La voz del pez gordo penetra implacable en la sordera caseosa.
Mientras tanto, una entidad maligna germina,
en la espora abierta de ésta tierra:
“Los elegidos desconfían de su posición,
al igual que su Dios, con seguridad
y la ceremonia será, tarde o temprano, clausurada”.

Los numerosos ciudadanos de este Estado Caseoso,
aún no han sido testigos de la verdad.
Casio ha llevado su creencia hasta el límite:
“Lejos de la ciudad vive el nuevo elegido”.

Su familia le desconoce al punto de creer en su ordinario camino.
Ésta ha de ser su decisión ahora:
“Sigue el secreto linaje de tus ancestros sin que lo sepan.
El tabú de todo esto será tuyo”.

Un pródigo caseoso ha nacido.

“El mal observa a los faltos de clarividencia”,
menciona Casio ante el nuevo pródigo.
Por fin suelta la voz este último:
-¿Es ésta mi única forma de destino, de conspiración, de escape?-
Le responde su ídolo: “Por ahora, es la única forma posible”.

En presencia de fastidios adolescentes,
El Dios le arranca su hormonal disposición,
Y se apodera de la situación.
Ahora, el novato aprecia un abanico de posibilidades.
“El antagonista ha estado siendo tu sombra y cuerpo.
Ahora sale de ti e invade el espacio y tiempo.
Todo dependerá de ti”.

Un Dios, un pródigo, un opositor,
El juego empieza a tomar sentido
¿Tiene más sentido cuando existe la maldad y el misterio?
¿Tiene sentido obsesionarse con el juego?
¿Tiene sentido jugar con el destino?
Sólo presiona el botón de partida,
un enigma sin solución,

continuará…



Game over

Fue tu última vida,
Lo intentaste…
Pero tus ases y mangas no te dieron lugar.
Fue tu última vida,
Tu última vida
Y tu consola, tu escritura
esas tardes de verano,
esos sueños pixelados
siempre fueron análogos
Análogos, y todas tus muertes no te dieron lugar.

Tu eléctrica vida,
Te comiste los comodines,
Tu control eléctrico, has perdido.
Fuera o dentro del juego,
Tu tiempo de rol no tiene retorno.

¿Para qué agotar la capacidad de jugar a unos cuantos trazos de realidad?
¿Para qué agotar la delicia del fracaso a unas cuantas vidas limitadas?

El jugador juega un rato a creerse creador
El creador desea darse vuelta el mundo.
A ninguno, ni al mundo, le pertenece el juego. 

Déjate perder,
Y piensa que puedes fracasar mejor.
Déjate perder,
Y piensa que ganar solo existe
dentro de tu juego.

-Mañana ganas, hoy pierdes-

¿Volverás a intentarlo?
Paga el precio
e inserta tu última moneda.



2006

Gragkomania