En el centenario de la muerte de Vladmir Lenin, dirigente de la Revolución de Octubre, fundador de la Unión Soviética, cito este fragmento del libro de Antony Sutton, “Wall Street y la Revolución Bolchevique”, muy revelador respecto a la "historia secreta" detrás del líder ruso:
“En el interín, dentro de Rusia la situación económica se había vuelto crítica y la inevitabilidad de un abrazo con el capitalismo comenzaba a alborear para el Partido Comunista y sus planificadores. Lenin cristalizó esta conciencia ante el Décimo Congreso del Partido Comunista Ruso: Sin la asistencia del capital nos será imposible retener el poder proletario en un país increíblemente arruinado en el cual el campesinado, también arruinado, constituye la amplia mayoría – y, por supuesto, a cambio de esta asistencia el capital nos exprimirá con cientos de porcentajes. Esto es lo que tenemos que entender. Por lo tanto, o bien este tipo de relaciones económicas, o nada…
(…) En la mente del lector debe haber surgido la pregunta de: ¿fueron, por lo tanto, estos banqueros también bolcheviques encubiertos? No. Por supuesto que no. Los financistas no tuvieron ideología. Sería cometer un grueso error de interpretación presuponer que la asistencia a los bolcheviques estuvo motivada ideológicamente en cualquier sentido estricto. Los financistas estaban motivados por el poder y, por lo tanto, apoyaron a cualquier vehículo que les ofreciese un acceso al poder. Trotsky, Lenin, el Zar, Kolchak, Denikin – todos recibieron ayuda, en más o en menos.”
No hay comentarios.:
Publicar un comentario