miércoles, 30 de marzo de 2022

martes, 29 de marzo de 2022

Bienvenidos al nuevo Chile, donde reina la ley del talión y la ley de la calle.

lunes, 28 de marzo de 2022

¿Y qué pasaría, querida, si en un hipotético anti universo, el tiempo avanzara hacia el pasado, atrás de la primera gran explosión? Como en el poema de Millán, el río de la historia podría invertir el curso de su corriente, el agua de las cascadas subiría, la pandemia volvería a su origen desconocido, las esquirlas del estallido regresarían a su punto detonante, no habría aparente malestar, el grito de las calles volvería a las gargantas hambrientas, desandaríamos aquellos pasos desesperados, no habría ruptura, regresaríamos al primer orgasmo, volveríamos al punto de encuentro, para luego, desconocernos, sin reproches, sin el costoso peso de la noche ni el lastre de la existencia.
Lo de Will Smith contra Chris Rock ¿Fue planeado? ¿Legítima defensa? ¿Una reacción impulsiva? Baudrillard y Guy Debord tenían razón: estamos en la sociedad del simulacro de la realidad, y la espectacularización de la violencia made in Oscars. Nada es verdad hasta que la realidad te golpea en la cara.

domingo, 27 de marzo de 2022

Lucy Oporto, "Lumpenconsumismo, saqueadores y escorias varias: tener, poseer, destruir". (fragmentos)

Cuando en su lucha contra los monjes los demonios se ven
impotentes, retirándose un poco, observan qué virtud es
descuidada durante ese tiempo e irrumpiendo súbitamente
por ese flanco, saquean a la desdichada alma.

Evagrio Póntico, Tratado práctico, 44 (s. IV)


"Con ocasión de la crisis social y barbarie en curso en Chile —también llamada 'estallido social' 'movimiento social' 'insurrección' 'sublevación' 'despertar'— ha venido dándose un extraño fenómeno: una incapacidad transversal, entre representantes de visiones alternativas y progresistas en amplio sentido, de aceptar el peso de la realidad de gravísimos hechos específicos ocurridos desde su inicio. Esto es, la destrucción sistemática de infraestructura pública y privada, empezando por el sabotaje y destrucción del metro de Santiago y, después, destrozos, saqueos e incendios de supermercados, farmacias, microbuses, peajes, tiendas, hoteles, bancos, municipalidades, iglesias, edificios patrimoniales y monumentos históricos, a lo largo del país y a mansalva.(...)".

“'Chile despertó' y 'Chile cambió' se han convertido en eslóganes populacheros y oportunistas. Pero Chile no ha despertado, ni ha cambiado. Lo acontecido el 18 de octubre de 2019, con la destrucción concertada y coordinada de varias estaciones del metro de Santiago, fue el punto de arranque de una crisis social largamente preparada desde las sombras: una incubación de contenidos y procesos inconscientes que, finalmente, han brotado a la luz en toda su obscenidad e impudicia latentes durante décadas, si no durante siglos".

“Lo material no importa; total, se recupera” es otro eslogan populachero y oportunista, (...) que pretende expresar un aparente desapego de lo material. Pero se trata de otra impostura, que busca encubrir el entreguismo de la sociedad chilena al hedonismo de la sociedad de consumo, impulsado por la Concertación de Partidos por la Democracia, uno de cuyos orgullos declarados ha sido, precisamente, la llamada democratización del consumo”. 

El final de nuestra historia fue, al fin y al cabo, como la historia de Chile después del 18 de octubre: una espada de Damocles amenazando con dividirnos la vida, un banquete mal servido de rencores, sospechas y otros demonios.
Si lo personal es político, querida, entonces lo que creímos una relación democrática, no fue otra cosa que deseo y voluntarismo sin suficiente consenso.

Ad Hitlerum

Los rusos afirmaron que Zelensky es un “neonazi”, debido a la aparición del grupo paramilitar Batallón Azov. Mientras tanto, los medios europeos han llegado a decir que Putin sigue los pasos del Tercer Reich y podría ser el nuevo “Hitler” del Siglo XXI. Al parecer, el Fuhrer nunca murió, continúa vivo en el discurso de la guerra, y será invocado cada vez que se intente neutralizar y deshumanizar al enemigo opositor.

“Somos las nietas de las brujas que no pudiste quemar”. Y hoy, las herederas se han tomado la hoguera, con todo el peso de la noche, y han ocupado el lugar del verdugo.

sábado, 26 de marzo de 2022

El poeta caníbal

José Luis Calva Zepeda, el llamado “Poeta caníbal” de México. Nacido el 69. A raíz de una infancia marcada por el maltrato de su madre y un abuso sexual, fue criando un odio parido hacia las mujeres, además de explotar una incipiente bisexualidad. Pese a estos problemas, consiguió estudiar, cultivarse y luego casarse. Tuvo dos hijas. Se separó pronto. De vuelta a la soledad, se refugió en la escritura: poemas y cuentos que ilustraban una retorcida visión de las cosas. Publicó posteriormente algunos libros, tales como Instintos caníbales, Prostituyendo mi alma, Réquiem por un alma perdida, Krish, el aprendiz de mago, Antigua, Caminando ando y La noche anterior. Escribió además historias de terror y obras de teatro. Sus poemas siempre los firmaba con el pseudónimo de “El Caminante”: “Algún día todos tendrán que seguir al Caminante”, decía en uno de sus fragmentos. Al inicio de uno de sus volúmenes, una línea indicaba: “Dedico estas palabras a la creación más grande del universo (que soy yo)".

Cuando conoció a su primer amor, Verónica Consuelo Martínez Casarrubia, ambos se enamoraron profundamente. La madre de Verónica nunca estuvo de acuerdo con la incipiente relación, pero ella no le hizo caso. Sin embargo, los problemas de carácter fueron minando a la pareja y, ese mismo año, Calva Zepeda asesinó a su enamorada para luego descuartizarla, cometiendo así su primer delito. Abandonó el cadáver desmembrado en Chimalhuacán, en el Estado de México. Allí lo encontró la policía y Calva Zepeda se convirtió desde ese momento en un prófugo de la justicia.

Una vez en la Colonia Guerrero, convirtió su casa en un escenario de terror: conservaba cuchillos, libros de brujería, veladoras, mucha droga y textos de terror inspirados en Lovecraft. En aquella zona conoció a su segundo amor o, mejor dicho, su segunda víctima: Alejandra Galeana Garavito. La chica se enamoró de Calva Zepeda, quien le escribía poemas y le juraba amor, sin sospechar que se trataba de su futuro asesino. Uno de los escritos del poeta que Alejandra conservaba en su recámara decía:

"Es la ausencia de tu cuerpo que me falta junto a mí.

El deseo de atraparte entre mi almohada y sus sueños.

Es tu mirada que se clava en mí como lanza de cazador".

Un segundo poema señalaba:

“Me cediste todas tus partes.

Tu aliento, tus uñas y tus ansias.

Me vestiste de ti y fui tu ave.

Canté tu canto que nunca calla”.

Convencida de su amor, Alejandra Galeana se fue de su casa para no regresar, dejó de responder las llamadas de su madre, quien tampoco estaba de acuerdo con su relación con Calva Zepeda. Una noche, ocurrió lo previsible: Calva Zepeda asesinó a su novia, y, al igual que Verónica Consuelo, la descuartizó sin piedad. Luego, decidió guardar el cadáver en su departamento. Al día siguiente, cocinó algunas de sus partes para el desayuno. Producto del hedor emanado del cuerpo de su otrora amada, los vecinos alertaron a la policía y finalmente fue detenido. Su cómplice homosexual, Juan Carlos Monroy, también fue procesado por su presunta participación en cada uno de los crímenes. Los medios bautizaron inmediatamente a Calva Zepeda, “El poeta caníbal”.

En la cárcel, comenzó a escribir una nueva novela: “Caníbal, el Poeta Seductor”, la cual quedó inconclusa. Uno de sus fragmentos rezaba: “Tienes frente a ti sólo dos opciones: vivir o morir. Morir es sencillo y no es necesario dejar de respirar para hacerlo. Sin embargo, para vivir es necesario morir”. En esta novela manuscrita, Calva Zepeda narraba la historia de un bebé recién nacido que fue abandonado por su madre y rescatado por una perra callejera. Posteriormente, el personaje fue criado por un bibliotecario, quien le pone el nombre de Dante y le enseña a leer y a escribir, inculcándole el valor de la poesía. A partir de entonces, Dante comete su primer crimen, dejando junto a sus víctimas mujeres un poema escrito sobre la piel. Toda una novelesca declaración de principios, tensionando o desafiando el límite entre ficción y realidad. Increíblemente, a la cárcel lo iba a visitar una joven llamada Dolores Mendoza, su nueva admiradora, quien afirmó ante los medios de comunicación que nunca vio en Calva Zepeda a ese caníbal del que tanto hablan, sólo a un hombre bueno y sensible.

Pero la historia del Poeta caníbal tuvo un final de lo más bizarro. Tras el asedio de los internos, Calva Zepeda aparentemente se suicidó, durante el año 2007. Apareció ahorcado con un cinturón en su celda. Dejó dos notas póstumas, dirigidas a su madre. La primera aseveraba: “perdóname, mamá”. Su segunda nota afirmaba: “Estoy resuelto a irme, no soporto más el peso de mi desgracia (...) no puedo escribir más, me voy y perdón por el dolor tan grande que les causo”. Al funeral llegaron los familiares de las víctimas, exigiendo ver el cadáver de Calva Zepeda en el ataúd para cerciorarse de que estuviera realmente muerto. Al sepelio asistió además su hermana Claudia, pero no su madre. Tampoco fue ningún sacerdote. Sobre la tumba, cubierta de flores, destacaba una corona que la familia de Calva Zepeda colocó, ostentando una leyenda que decía: “Poeta seductor”.

Uno de sus fragmentos más significativos nos permiten interpretar su macabra lectura de la realidad:

“La diferencia entre la vida y la muerte es blanca, se evapora en un instante y pesa solo un gramo. Ahí estaba yo sentado frente a mi única opción. Ahora dime, mi querido lector, ¿tú, estás en la bienaventuranza o en la tribulación? Y... si estás seguro del lugar en donde te encuentras... ¿Estás con el diablo o estás con Dios?”

Otro caso problemático de escritor psicópata, de poesía, literatura y maldad. Un Jack Unterweger mexicano, solo que nunca “rehabilitado”, solo que nunca “comprendido”. ¿Qué hubiera escrito Bolaño sobre Calva Zepeda?


Realismo, que no buenismo.

viernes, 25 de marzo de 2022

Tengo un colega en el colegio que dirigía un preuniversitario y que, por motivo del estallido y la pandemia, tuvo que cerrarlo. Intentó implementar un taller de preparación para la prueba que fuera pagado con las subvenciones, al garantizarles a los cabros un puntaje razonable. Sin embargo, y por causas que exceden nuestra comprensión, solo será pagado a boleta de honorarios, motivo por el cual el colega tiene pocas horas ahí y trata de compensarlas trabajando de Uber. Literalmente, se volvió un profe "taxi".

Cuando le dije que extrañaba el preu, (trabajaba con él ahí, el 2019) me respondió que también, pero ya era. El tiempo, sin duda, sepultó algunos proyectos. Implicó una quiebra para muchos y una crisis para otros. Lo único con lo que contamos, después de todo, es con la porfía de seguir andando, en medio de la debacle y la batahola. Al no haber punto de retorno, acaso la única ruta es hacia adelante, aunque nos lleve al desvío.

jueves, 24 de marzo de 2022

Un par de alumnos de Segundo Medio se agarraron a combos en el colegio. La profesora del curso trató de separarlos, pero fue inútil. Nerviosa, fue a buscar al inspector. Junto a un auxiliar lograron separar a los cabros. Resultó que uno de ellos habría molestado al otro porque a este último le tocó barrer un frasco que botó al suelo. Entonces, el cabro que barría, cabreado, fue a pegarle al que lo molestaba, sin mediar aviso. Los compañeros habrían tratado de intervenir. Sin embargo, nada parecía calmar a este par de cabros enfurecidos.

Conversábamos sobre eso en la sala de profes. La colega a cargo de los cabros dijo que se vio superada. Solo atinó a salir y buscar ayuda, porque apelar a la buena voluntad de los chiquillos del curso sería peor, y podría precipitar una confusión aún mayor. Un colega mencionaba que eso era más común de lo habitual, considerando que el colegio en sí era tranquilo. Otro, discrepaba, señalando que la pelea de los cabros podría ser un síntoma de la vuelta a clases presenciales. Algo anómalo en un contexto de “verdadera normalidad”. Otro colega arguyó que el conflicto reflejaría el clima de polarización social y política que aún vive el país. Yo le dije a este colega que han ocurrido muchos episodios de violencia escolar durante el regreso a clases, y en muy poco tiempo. El mismo día miércoles se reportó el caso de un alumno detenido producto de una pelea entre estudiantes de un liceo de Copiapó. También se supo de una apoderada que apuñaló a un profesor del Liceo comercial de Talcahuano. “¿Qué estará pasando”?, se preguntó aquel colega, insistiendo en la idea de la polarización como posible factor de la violencia. “Si ni entre los adultos, a veces, existe un mínimo de razonabilidad”, continuó diciendo. “Hay veces en que uno dice la palabra paz, y te quedan mirando con cara de sospecha”, remató, antes de salir de la sala. El resto de los colegas quedó en silencio, y siguieron con lo suyo, apenas escuchando.

Al rato, llegó la profesora del curso que fue testigo de la pelea. “¿Cómo estuvo el segundo round?”, le preguntaron. Ella dijo simplemente que nada, que todo estaba más tranquilo, que ya habían llamado a los apoderados. “Armaron su propio Club de la pelea”, comentó un colega, irónico. “Y qué se puede esperar, si ni los apoderados controlan a sus hijos”, dijo otra colega. Siguieron trabajando como si nada, a la espera del próximo timbre, para continuar con el siguiente round. “Si ni entre los adultos, a veces, existe un mínimo de razonabilidad”, volví a repetirme esa frase dicha por aquel colega. La tesis sobre la polarización como detonante habría impuesto su realidad, y habría cobrado carne en la memoria. Como profesores, nos tocaba ser testigos de la violencia, y estábamos llamados a detenerla, por el bien de la educación o, de lo contrario, sufrirla.

miércoles, 23 de marzo de 2022

Vulva nave espacial

Una asociación feminista alemana, "Wer Braucht Feminismus" (¿Quién necesita feminismo?), ha diseñado una nave espacial bautizada como “Vulva Spaceship”. Según cuentan, esta nueva nave fue pensada para competir "con los diseños fálicos de los cohetes".

“Estamos viviendo en una época de pandemia mundial, los precios del petróleo y la electricidad están disparados y la crisis climática amenaza nuestra propia existencia. Mientras tanto, los multimillonarios vuelan al espacio en cohetes con forma de genitales masculinos. Para nosotros, esto planteó algunas preguntas muy importantes. ¿No debería ser el espacio para todos? ¿Y es un cohete con forma fálica realmente la mejor manera de llegar allí? Queremos restaurar la igualdad de género en el cosmos, por lo que hemos decidido revolucionar los viajes espaciales para siempre”, explicó Jasmin Mittag, directora del proyecto.

Por una misión espacial con perspectiva de género, vulvas siderales. Sencillamente, porque el patriarcado, cual ente metafísico, trasciende las estrellas.

martes, 22 de marzo de 2022

¿Y dónde quedaron los versos que te debía? En el asfalto, confundidos con la violencia de la noche.

lunes, 21 de marzo de 2022

Día mundial de la poesía

Mucho antes de la peste, hubo un tiempo en que la poesía era una verdadera fiesta. Todos asistían a ella confiados en la camaradería y en el virtuosismo de los comensales, frente a la decadencia general. Nadie pensó, sin embargo, que aquella fiesta se volvería demasiado tóxica o se prolongaría más allá de lo establecido, hasta apagarse todas las luces y, con ellas, la diversión. La verdadera fiesta, claro está, era lo que sucedería después, o eso era al menos lo que dejaban entrever los rumores de pasillo. Nadie se imaginó que algunas de las estrellas de la noche llegarían a amarse de manera clandestina, para luego acabar boxeándose y deseándose el infierno. Demasiada poesía allí donde no alcanzaban las palabras.
"Me resulta inaguantable tropezar con la palabra poesía escrita con mayúscula; o que se diga de un poema que “toca lo esencialmente humano”; que se infle el asunto. Creo que comer, o gritar o hacer el amor, o reírse, o etc., es también y por ejemplo, una manera de tocar –o expresar, para ser más precisos– lo que se ha dado en llamar esencialmente humano. De no ser así tendríamos que identificar al poeta con una suerte de vaca sagrada, de intocable, de pajarón, que con voz misteriosa recita Poesía, toca lo esencialmente humano. Y esto es mentira, y por suerte. Lo lamentable es que generalmente sean poetas quienes colocan las cosas, su oficio, en este terreno pringoso, de autoadulación. Su actitud es parecida a la que suele adoptar la gente de publicidad que dice “crear”, en el sentido artístico, cuando en el mejor de los casos se está inventando un slogan o imaginando una disposición gráfica vendedora. De todas formas estos hombres de la publicidad insuflándose, sobrevalorando su oficio, pueden obtener de él mejores honorarios. Pero esta justificación, esta gratificación en el terreno práctico, no ocurre con los poetas, ya que ninguno, al menos en Argentina, vive de su profesión de poeta. Así se trataría el suyo, de un gesto meramente ramplón, sin atenuantes. Es que los poetas son a menudo adolescentes tardíos; de esta manera se sienten perseguidos, incomprendidos, solos y ansiosos; es también que buscan gratificación donde no pueden encontrarla: no hay dinero para ellos y, por otra parte, al prestigio lo rechazan y muchas veces por mera vanidad. Por cierto la gratificación para el poeta se identifica con la comunicación y también con el gozo por la cosa realizada; esto complica las cosas, el asunto no es fácil, y menos en nuestra época que fomenta sus debilidades. Pero la poesía no es consecuencia de este sector subdesarrollado, o neurótico, de la personalidad del poeta. Si bien el poeta ciertamente es un bicho raro, lo es por sus limitaciones y no porque escriba poemas. Cuando hace poesía, cuando escribe, no se pone raro ni solemne, se pone serio, concentrado. No necesita hacer –aunque lo haga– chiquilinadas, o travesuras, o canalladas, o estupideces, por más simpáticas o envidiables o censurables o tolerables que ellas puedan parecer. Tampoco cabe el transcendentalismo. Además, ser poeta en un país ahora dependiente como el nuestro, y en consecuencia un poco provinciano, es todavía una actividad de excepción, prístina; aunque se lo rechace sigue siendo “el vate”. Así dos fuentes alimentan esta versión exagerada, ampulosa del poeta y de su trabajo: la propia estimación y la estimación obsecuente –o la subestimación– del medio; ambas son hijas de la inseguridad individual o colectiva, respectivamente. Por esto conviene insistir en que no es el del poeta un oficio milagroso o sobrenatural o de loquitos o de elegidos. Es una tarea que cumple la gente". Francisco Urondo.
Es fácil culpar al sistema, cuando no tienes en orden tu vida.

domingo, 20 de marzo de 2022

Otro fragmento más del futuro libro:

"A la salida un tipo nos seguía hablando de los poetas de los 80, de quiénes eran los mejores y de que nos hacía falta publicidad y sentido del negocio. Lo seguíamos para dilatar la noche. Frente a un café prometió difundir las lecturas, en un idioma ingenieril que no entendí. No nos invitó a nada. No había dinero. Sí había noche. Pero ya no había poesía, no porque Aristóteles España haya muerto, no porque el Premio Nacional valiera callampa, sino porque nuestra cabeza ya estaba en otra parte, así como la vida, según un poeta francés de cabecera. Entonces volvimos a casa a pie, procuré que nadie más nos siguiera, saqué las llaves, escribí esto. Llegué a la idea de que ella, brillante por sí sola, recordaría exactamente lo mismo, excepto la parte de los poetas. Medité a mi manera en la soledad de la página".
Otros extractos de mi futuro libro "A destiempo", para quienes aún se dignan a seguirme:

"Las intenciones siempre ocultas de los otros, son el arte de la sugerencia. Solo podemos expresar lo que no se ha dicho. Solo podemos juzgar lo visible. Sin embargo, detrás de eso, existe todo un iceberg de posibilidad, hundiéndose hasta el fondo. De un libro, por ejemplo, solo se deducen las páginas, todo el trabajo de edición, de escritura, de publicación está implícito, escondido, de alguna forma, y hay que reconstruirlo, o derechamente, imaginarlo. En una tierra vacía se puede instalar un vertedero, un supermercado o una nueva plaza. En una pieza vacía, a oscuras, se puede reconstruir más de alguna historia insomne. Pienso en todo esto, mientras la puerta del refrigerador, vacío, me sugiere querer comprar mercadería para la semana. Es el vacío que exige su porción de mundo, nuevamente, aunque no fuese precisamente por razones elevadas ni ambiciosas, sino que por simple necesidad, palabra tremendamente subestimada.

...

El hombre público está sujeto al gesto imposible de mirar. Su voyerismo desea a medida que se distancia. Como es debido, miro allí donde la mujer de la esquina ya dejó su sombra en los sujetos de mirada extraviada. Precisamente porque la mirada está perdida es porque no tengo nada que perder allí. Obedezco a la pulsión como buena mascota del deseo, también como buen militante del aburrimiento. Asumo por un instante el rol de funcionario de esas energías, frente a las mujeres solitarias que enseñorean las miradas y el sistema y el universo que en su bella indiferencia recicla nuestra desesperación, para que los próximos Platones de la historia continúen viendo en el movimiento de los astros la sombra del amor.

¿Qué pretendo ensayar con esto? que aquel progreso, que aquella razón, que aquella historia, que aquel sistema no existen sino como la zona cero de todas las miradas perdidas. No hay futuro en lo absoluto más que el de esas miradas perdidas en la plaza pública. Solo la figura de sal de nuestras fantasías que voltea mirando con una mezcla de horror y de compasión. El mundo es, mejor dicho, en palabras de Camus, el vértigo de esa angustia, de aquello que simplemente se distancia, se expande, a medida que se desea. Dejar ir lo que se desea, he ahí la mirada, la historia, la escritura".

sábado, 19 de marzo de 2022

Lo más complejo de tener tantos cursos siempre ha sido memorizar todos los nombres de los cabros. La pedagogía también requiere de reconocer muchas caras y muchos nombres que luego quedarán en tu retina, en el recuerdo o en el olvido.

jueves, 17 de marzo de 2022

De haber sabido que nuestra historia se precipitaría de esta manera, no hubiera pretendido saturar la trama para forzar un final.

miércoles, 16 de marzo de 2022

lunes, 14 de marzo de 2022

Hay quienes necesitan crear un enemigo, un monstruo, para proyectar su propia miseria interior.
"Cada entrada se titula con una palabra. Veamos una de las mejores: "Imbéciles". No es novedad afirmar que Savater se distingue también como maestro de lecturas. Sugiere en este capítulo La imbecilidad es cosa seria de Maurizio Ferraris, donde se define dicha enfermedad endémica de nuestra especie de la siguiente manera: "Ceguera, indiferencia, hostilidad a los valores cognitivos, más extendida entre quienes tienen ambiciones intelectuales". La descripción es perfecta, ¿verdad? ¿No encontramos hoy entre la intelectualidad argentina la colección más peligrosa de imbéciles?

Como si se tratase de perlas negras, la recopilación periodística va engarzando a los imbéciles más peligrosos de nuestro tiempo: los fanáticos de la identidad, de la corrección política y de tratar a los animales como humanos (y viceversa); los separatistas catalanes y vascos; los nihilistas blancos; los enemigos de la Constitución; los que celebran a los terroristas como héroes populares; los progres que creen tener el monopolio de la virtud; los extremistas, en especial los Viejos Revolucionarios.

sábado, 12 de marzo de 2022

"Quiero que me dejen en paz. Quiero sentarme en la hierba. Quiero montar en mi caballo. Quiero follar con una mujer desnuda en la hierba del monte. Quiero pensar. Quiero rezar. Quiero dormir. Quiero mirar las estrellas. Quiero lo que quiero. Quiero prepararme mi propia comida, con mis propias manos, y vivir así. Quiero leer libros. Quiero escribir libros, libros en los bosques. Thoreau tenía razón; Jesús tenía razón. Todo está mal, yo lo proclamo y que se vaya todo al infierno. No creo en esta sociedad; pero creo en el hombre. Así que, oye, arréglatelas con tus propios huesos".

Jack Kerouac, un siglo.

jueves, 10 de marzo de 2022

Dostoievski ¿cancelado por ruso?

Una Universidad de Milán tomó la decisión de suprimir un curso sobre Dostoievski, a raíz del actual conflicto en Ucrania, según dicen, para evitar cualquier tipo de polémica, ya que se trata de un momento de fuerte tensión política. Yo digo: ¿Qué culpa tiene la literatura y la cultura rusa del proceder de sus gobernantes? Es más: ¿Qué culpa tiene la literatura y la cultura en general del proceder de sus políticos? ¿No será que la obra de Dostoievski está ahí justamente porque tiene mucho que decir respecto a la cultura y a la nación rusa, más allá de las diatribas bélicas? ¿Con qué moral se impone a toda la historia de una nación ese criterio de censura en la contingencia? ¿No será que hoy más que nunca se debería hablar de Dostoievski, por ejemplo, con su novela Crimen y Castigo, que representa ficcionalmente la miseria psicológica del ser humano? Dostoievski, en Los hermanos Karamazov, mostró la innegable maldad de la inquisición, la acción del Diablo en el seno de la sociedad y la esperanza en la resurrección de los muertos. Mostró en Los endemoniados cómo una nación entera puede verse encaminada hacia el abismo, si no busca antes la salvación. Previó, con una agudeza bestial, el escenario de un mundo sumido en el nihilismo. Es ese el mundo que vivimos hoy: un mundo que parece perfectamente retratado por el escritor ruso, un mundo sin Dios, y los hombres en él se disputan una miserable cuota de poder para sublimar su vacío interior. Escribía Dostoievski en Memorias del subsuelo: “En definitiva, ni siquiera sabemos dónde habita ahora la «vida real», ni qué es, ni por qué nombre se la conoce. Déjennos ustedes solos y sin libros y en seguida nos haremos un libro, nos extraviaremos. No sabremos qué partido tomar, a qué agarrarnos, qué amar y qué odiar, qué respetar y qué despreciar. Hasta encontramos difícil ser seres humanos, hombres auténticos, de nuestra propia carne y hueso; nos avergonzamos de ello, creemos que es ignominioso, e intentamos convertirnos en una especie nunca vista de hombres generalizados”.

miércoles, 9 de marzo de 2022

¿Y qué pasaría si te dijera que la guerra fue nuestro único destino, y todo el desastre ya se avizoraba, latente, en nuestra paz apócrifa?

lunes, 7 de marzo de 2022

"En la guerra todos mueren”, dijo una alumna en clases. Lo cierto es que el contexto bélico nos sirve de pretexto reflexivo. En efecto, en la guerra siempre se muere, pero la vida misma también puede ser una guerra, consigo mismo o entre los otros.
"No debería ser descabellada la propuesta de conceder a Vladimir Putin el próximo Nobel de Medicina. La llamada invasión de Ucrania ha surtido el prodigioso efecto de que los medios occidentales hayan dejado de hablar del Covid, o de víctimas mortales derivadas del Covid, o de hospitalizados por causa de la enfermedad, ni de medidas precautorias que, al menos en lo que se refiere a las imágenes que nos ofrecen del conflicto ucraniano, no se están siguiendo. Es una prueba más de cómo la rana hervida lo acepta todo sin oponer resistencia crítica. Las opiniones públicas de países como el nuestro aceptan sin rechistar la versión oficial de las mismas instituciones estatales que nos mienten y engañan a diario. Si dijeran que los rusos están lanzando elefantes voladores en las ciudades ucranianas, la mayoría lo creería. El desistimiento moral e intelectual de una parte de la población europea prefigura un futuro de pesadilla".

¿Se darán cuenta los ucranianos de que están siendo usados como carne de cañón por Biden y la Unión Europea? – Alerta Digital

domingo, 6 de marzo de 2022

Nunca se trató de buscar la verdad, siempre se trató de instalar una narrativa.

viernes, 4 de marzo de 2022

No hay escritura posible que pueda superar la brutalidad de la realidad.
Primero, el enemigo de la humanidad era un virus chino. Ahora, lo es el líder ruso. Los medios tratan de mantener el mayor tiempo posible en el ojo público esta neo Guerra Fría, devenida Tercera Guerra Mundial y Estados Unidos vuelve a la carga con su manía por crear enemigos y mantener su ya moribunda hegemonía.