viernes, 9 de julio de 2021

Tras acabar la edición del avance de su próxima obra “Año Tres Mil”, el cuidador de autos me regaló una Antología de Nuevos Narradores de Valparaíso, del año 71, presentada por la Sociedad de Escritores de Valparaíso: -Tiene que leerlo- dijo –y yo creía que hablaba sobre el Valparaíso maldito. Ando más perdido-. –Habrá que ver- le contesté escuetamente. Recuerdos fugaces vinieron a mi mente. Agridulces. Los aplaqué, abriendo el libro en una página al voleo. Unas líneas del prólogo llamaron mi atención: “Hoy nuevamente movemos el timón de este barco de ilusionados y quijotes tripulantes, para recorrer otra ruta y alcanzar el punto marcado entre la latitud y la longitud del tiempo”.
Pensándolo bien ¿quién en su sano juicio quisiera ser presidente? Y de Chile, más encima. Como decía Parra: hay que estar dispuesto a ser escupido previamente. ¡Tremendo cacho!