miércoles, 2 de agosto de 2017

Lepra

Jack London tenía un relato, Koolau el leproso. En él los leprosos eran confinados en una isla. Algo así como una isla de los enfermos. Se veían obligados a rebelarse. La premisa de London era la de la lepra asumida como bandera de lucha. En el Levítico bíblico, en cambio, la lepra era una especie de castigo divino, individual, asumido de forma penitente y silenciosa. Una prueba para sus creyentes enfermos. Una prueba para su purificación. Los relatos sobre la lepra han ido cambiando. Al parecer la histeria colectiva sobre la lepra en Chile tiene más que ver con su carácter mítico que con su carácter clínico. Perdura todavía el imaginario literario del leproso destinado a enfrentar con sus congéneres el holocausto, o el imaginario religioso del leproso pagando por sus pecados al fondo de un desierto sometido al arbitrio de la enfermedad de los dioses.