sábado, 25 de julio de 2015



¿A quién dan de comer las conquistas interiores? decía el escritor Robert Walser. En una sociedad donde lo exterior es la regla, donde los éxitos se miden en cantidad, en una realidad práctica: qué es lo que tienes, qué es lo que has ganado, qué es lo que ofreces, qué es lo que te propones; la pregunta, sin embargo, sigue imperturbable. Es algo que solo cada uno debe responder a su manera. Esas conquistas interiores quizá sean algo inexpresable, incluso irrealizable, pero por lo mismo, algo demasiado personal, algo auténticamente único.