lunes, 1 de abril de 2019

Recién hablaban en La Red sobre Diego Portales, Grez y otros académicos de historia. Me quedó dando vuelta una expresión que Portales escribió en una carta a Joaquín Tocornal: "el peso de la noche". Era, según Portales, el peso que debía prevalecer sobre el orden social, el peso de la institucionalidad. No sé quién habló sobre una expresión idéntica, Peter Handke parece, pero en tono más bien existencialista: el peso del mundo. Me pregunto a esta hora, cuando ya son las 1 de la mañana del Lunes y toca trabajar al otro día, ¿qué pesará más sobre uno? ¿el peso de la noche? ¿el peso del mundo? ¿o el peso de la conciencia, sin la cual no habría ni orden ni sentido, esta última, la palabra pesada por excelencia? Lo único que sigue pesando a esta hora, sin embargo, es el cuerpo, cortado durante todo el domingo, y la noche que conspira para dejarte atado al peso del sueño.