domingo, 6 de mayo de 2007

Manifiesto TAG

En lo musical

SEÑOR OYENTE:

Lo que está a punto de escuchar, en el momento en que se siente en el living de su casa/apartamento/inmueble/mediagua/cité/choza/cueva/hotel/motel, un día/noche cualquiera, y tome esta cinta para recrear sus oídos, ya saturados de por cierto, no es lo que usted/nosotros/vosotros/ellos/ellas/ ni sus hijos/as/esposa/o/amigos/as/tíos/as/abuelos/as/yernos/nueras/suegros/as/mascotas, si es que los tiene o los tuvo o los tuviera, hasta INCLUSO YO, considera como formato música. Música, por darle un nombre/concepto/estereotipo/ coherente y prodigioso a una serie de sonidos/ruidos/ritmos/ dispuestos en armonías amoniacas.

Ahora, lo que deseo expresarle a voz abierta o cerrada y redundante, si así lo prefiere (su menú/maní/mental), es que si de algo estoy convencido, es del silencio, y no del silencio que se escucha estando solo en su *casa y se pasea por dormitorios/recovecos/alojamientos con sosiego inmenso; hablo de algo brutalísimo, que lo delimita, lo conquista todo, así como algo de lo cual se vale en ruedas bípedas. No quiero parecer demasiado excéntrico, pero dígame por favor, si alguien se ha puesto a pensar, en instantes, fructíferos INSTANTES, como cuando tropiezas con una baldosa por la noche camino a la empresa/universidad/institución/campamento, te vuelas un diente y hay 100% de posibilidades de que caiga un temporal desde las nubes a tu cuello.

Para serle algo más honesto, pasemos al plano doméstico: el modo tierno en el que ronca su hijo, por la noche, el calor de la plancha en los dedos de su *mujer, rozando las mangas de sus camisas, el crujido de las paredes con el *viento, la olla de comida hirviendo, la sirena de una bomba de incendios, el reloj despertador, un mugido, un largo eructo, una catequesis papal, una banda sonora infinita, ¿no son cosas igualmente dignas de contemplar y de experimentar en un laboratorio? de ocupar un espacio en el que cavamos agujeros negros de realidad y creemos agregarle fases, ¡malditas fases!

*apartamento/inmueble/mediagua/cité/choza/cueva/hotel/motel.
*as/esposa/o/amigos/as/tías/os/abuelos/as/yernos/nueras/suegros/as/mascotas.
*es el movimiento del aire.

Como dije, ¿no se ha puesto a pensar que el silencio lo puede conquistar todo, ser un orfebre del silencio al respecto? que todos somos músicos, de alguna manera, en el momento en que transgredimos nuestras orejas y lenguas, y eso no se llama necesariamente sentimiento u otro sketch circense o paradisíaco.

Lo que estoy diciendo vale por igual para: científicos/molinos/palomas/sillas/sillones/presidentes/narvales/centrifugas/sostenes/de ales/polillas/consoladores/huinchas/krilles/revólveres/dragones/católicos/misioneros/inviernos/pantalones/plásticos/hormigas/micrófonos/mamuts/yunques/celulares/actrices/ataris/discos/pesos/pesos/etc... Todos elementos que una vez oíste por el simple hecho de dinamizar el cerebro de tu cerebro y, por cierto, elementos que oíste acoplarse los unos a los otros, en una orgía cerebral tanto en la Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Andrómeda, como dentro de tu ombligo.

OYE, OYENTE NO OYENTE, OYE, EL SILENCIO LO CONQUISTA TODO, ÓYELO, Y NINGUNO DE USTEDES ES OYENTE NI SILENCIOSO.

¡REGRABA EL NACIMIENTO DE TU PROPIA MUERTE!


Tag --: La bisagra escatimosa de la vida:--

Para dar ABC ALFA BETA GAMMA nombre a este neologismo sucio y democráticamente capitalista, según el trasfondo de los susodichos grandes peces, usted o usted, cosa, animal, mujer, hombre, focalizará el centro de sus reacciones neuronales en la brocha que le otorga trazos paradójicos a la muralla de los registros civiles. Primero comience con publicar un artículo de física moderna, y poetizarlo junto con manuales de química mecánica o mecánica y fábulas de grandes y huesudos peces. Luego, filtrar las porciones de empatía en una sola bombilla, para llegar al punto exacto. Esto de ninguna forma será un plagio, compruébelo usted mismo si quiere, y pegue aquí ______ un artículo de la ley sobre los derechos de autor, que por ADN todas nuestras hélices son plagios biológicos por ausencia y presencia. No existe prodigio de blancura en nuestros rincones de homosexualidad, y si existieran serían heterosexuales casados con heterosexuales, o sea homosexuales. Considerémoslo sin retóricas, deberíamos llegar al centro del punto anterior, o sea, arrebatar un pedazo de torta de ustedes y desmenuzar, milígramo a milígramo, aquello que sugiere el diseño de nuestras facciones; quiero decir, pegue aquí ______ un instructivo sobre cómo vivir sin demostrar facción alguna.

LA MISIÓN FINAL DEL TAG ES ELIMINAR LA CONCEPTOMANÍA, POR ELLO, EL TÉRMINO TAG EN SÍ NO ES MÁS QUE UN ARTIFICIO LINGUÍSTICO USADO COMO EXCUSA PARA REVELAR LA SUPRAIDEA DE “PANGEA” QUE ES SIMILAR AL CAOS INICIAL DEL UNIVERSO.


En lo abstracto y concreto

Para definir bien este concepto subjetivo y, a la vez, objetivo como plasticina, se requiere ser abierto a un universo de ideas efímeras en unión entre ellas. El término tag es una excusa simple que elaboré sin la meditación exhaustiva de nadie, sino que con abulia mecanizante y ha sido la fraudulenta fracción de los caracteres homogéneos y heterogéneos de la naturaleza. Cómo puedo sentirme siquiera humano si somos seres fracturados por la agricultura del pensar y sus viles *palabras. Según yo, la frase terrorista y siniestramente sabia de Descartes: “pienso, luego existo”, ha sido la síntesis de cuanta basurería sicodélica rige el mundo de hoy. Y ya a casi cuatro siglos de tal ácaro podemos afirmar y gritar con nuestras cabezas bien puestas, TODO LO QUE PIENSO ES FALSO, TODO LO QUE SE PIENSA ES FALSO, SOY FALSO, ERES FALSO, ¡SOMOS FALSOS! La concepción de que nosotros somos seres especiales está lejos de ser especial. La naturaleza nos dotó de azar, de ontología de un millar de respuestas y, en retribución, nuestra agricultura de la mente nos ha llevado al retrato fidedigno de lo que somos, y más aún, de lo que hemos conseguido, pero ¿Esto tiene sentido, o es sólo un menú de ideas abstractas en el tiempo? ¿Qué es el tiempo? ¿Algo lineal o la única pangea que queda con vida? Lo que maneja lo concreto, es el close/open de puertas eclécticas como la vida humana/artrópoda/cetácea/reptil.

Yendo al meollo del asunto, el tag es algo más o menos misántropo pero empático con el pangeísmo estructural que duerme en el útero de nuestro mundo de razón. El puzzle mundial de los conceptos es un planeta de micro civilizaciones endémicas. El mayor crimen de la historia es la agricultura y el creer que somos entes especiales, cuando la verdad es que NO SOMOS MÁS QUE EL TORNILLO DE UN ENGRANAJE, sutil y maternal, como el bing bang, como el final crunch. Es esto una salida para encausar una propuesta individual pero decididamente empática… “Jesús, siendo el gran mártir de la humanidad, demostró el mayor manifiesto y ejemplo de acción tag, al sacrificarse unívocamente por la humanidad”. Debo agregar a ello, que su pensamiento, desde un punto de vista meramente especulativo, era perfectamente egoísta, pero empático: una verdadera síntesis absoluta. Por eso asumo “todo cuanto teoría y praxis es egoísmo, pero empático de acuerdo a la forma en cómo se proyecta tal fusión poéticamente ambigua”. Esto no solo a nivel metafísico, sino a nivel de ______ “agréguese la anterior sentencia según los compartimientos de la reinvención en efectivo, como el capitalismo”.

Justamente, lo que se pretende es partir en un proyecto, cualquiera sea éste (incluso el hecho de agitar el O2 lo es) y, desde allí, conspirar entre colisiones escépticas y no coartar la sociabilidad camaleónica de lo artístico (esto, el arte, porque toda acción más o menos encausada se resume en arte, de ahí la totalidad, la oscuridad) sino “tomar prestado”, a lo cual se le considera “tag”, una microscópica parte de ese todo enajenado (no hay deudas por karmas). En la congestión de los bultos informes, ni siquiera uniformes, poner play al proceso… LICUARLO, REMOJARLO, INTEGRARLO TODO, junto con la propia unción mágica de tu esfera material. Verás cómo crece la llaga y la infección de tu resultado será más que collage: una impresión constante y múltiple de tu alteridad, una aberración humana de tu proceder; nunca universos paralelos, sino la misma rueda desmontable dentro de tu cosmovisión, la vuelta en 360º a la noche y el día: la REALIDAD, pero ¡pausa!

El tag no es para mí una egocéntrica acción, sino que podría llegar a ser una forma de vivir, si me lo propusiera, aunque no ahora, considerando lo complejo de mis resoluciones. Para mí, una manera de invitar al grueso de la pangea sistémica; la luz trasera, Dionisio y Apolo, dentro de los demenciales medios de control, fumigación industrial y fraccionalismo agricultor que complacen con penes biónicos para las putas de lo heterogéneo.

Medularmente, el tag, una manera de aplicar sinergias negras en un mundo tan pálido, blanco, el color de lo apático, lo cerrojo, lo solo.

El tag, empatía final llevada al extremo de lo homogeneizante y heterogeneizante:

EMPATÍA+MISANTROPÍA= PANGEA TOTAL, síntesis o Tag.

Porque el arte y la tragedia (resumen de las acciones humanas) están más desnaturalizadas que nunca,

El tag,

la evolución e involución de un todo-madre,

la totalidad,

la oscuridad,

el eje de todo

lo descriptible.