domingo, 3 de julio de 2022

"Ninguna democracia sin literatura, ninguna literatura sin libertad". ¿Pero por qué motivo estos extremos (democracia-libertad) reclaman la literatura en lugar de la filosofía? Solo ella está autorizada, sin limitaciones por parte del derecho imperante en cada caso, a decirlo todo. La filosofía, en cambio, no deja de ser responsable ante él, incluso allí donde quiebra sus barreras. Solo la susodicha literatura tiene el "derecho ilimitado de formular todas las preguntas, de sospechar de todo dogmatismo, de analizar todo supuesto, incluso cuando se trata de los de la ética o de los de una política responsable". ¡Sin censuras de ninguna índole! Solo la literatura, por lo demás, "apasiona" en favor de una expresión sin inhibiciones." Heriberto Boeder, El final de juego de Jacques Derridá.