lunes, 8 de agosto de 2022

“El comunismo “se jacta de la infalibilidad”. Todos los que se oponen al “credo” (esta expresión es utilizada por Engels) comunista son excomulgados. Marx escribió: “Bakunin debe tener cuidado. De otro modo le excomulgaremos”. Lo que Marx le escribió a Bakunin, eso mismo sentí cuando el año pasado uno de mis ex amigos de la Universidad me eliminó. Este compadre era un marxista devoto, parte del MUD. Fue tanta su decepción que hasta dijo que “ya no era su compadre”, únicamente por una diferencia de posturas ideológicas y mi renuencia a votar por su candidato presidencial. La cuestión resulta desilusionante pero también ridícula, por la sencilla razón de que nunca fui alguien muy movilizado ni convencido políticamente. Para él, en cambio, mi “nueva deriva política” significó casi una traición a su causa, en circunstancias de que nunca llegamos a debatir seriamente y con altura de miras. Veo con tristeza que así es como se comportan los abanderados por determinada idea o partido: excomulgan a sus viejos amigos que ya no comparten su forma de ver el mundo o de vivir la política. Se vuelven para ellos “enemigos objetivos”, perdieron, según su dogma, “consciencia de clase”.
El verdadero poder tiene dos caras y dos brazos.