viernes, 19 de octubre de 2018

La última declaración del ex número 1 del mundo, Marcelo "Chino" Ríos: "El chileno no sabe tratar a sus ídolos". Sus dichos desatan pasiones desde ambos flancos. Están los que sostienen que la grandeza requiere rigor y humildad para mantenerse, y los que defienden a rajatabla al aludido con una perspectiva incondicional, más allá de lo moralmente correcto. Veamos qué era lo que decía Nietzsche desde su mirada nihilista: "En el mundo hay más ídolos que realidades. Este es el «mal de ojo» y el «mal de oído» que tengo yo para este mundo". En chilito las cosas se dan de una forma muy particular. No hay payaso que no pase por ídolo con un poco de fama, pero tampoco hay ídolo que no reciba el sagrado bautismo de la aprobación sin antes haber recibido un escupitajo en el alma. Lo que figura como contradicción lógica y ética aquí es ley. El ethos nacional se va construyendo en base a ese proceso escatológico. Casi podría decirse que es parte de nuestro adn.