domingo, 10 de enero de 2016

El mundo como supermercado

En El mundo como supermercado, Houellebecq declara profético: "Sin embargo, cada individuo es capaz de producir en sí mismo una especie de revolución fría, situándose por un instante fuera del flujo informativo-publicitario. Es muy fácil de hacer; de hecho, nunca ha sido tan fácil como ahora situarse en una posición estética con relación al mundo: basta con dar un paso a un lado. Y, en última instancia, incluso este paso es inútil. Basta con hacer una pausa; apagar la radio, desenchufar el televisor; no comprar nada, no desear nada, no desear compar. Basta con dejar de participar, dejar de saber; suspender temporalmente cualquier activiad mental. Basta, literalmente, con quedarse inmóvil unos segundos". Frase premonitoria en relación al llamado de no ir a comprar a los supermercados por un día producto de la colusión. Cuestión que en resumidas cuentas resulta más bien una especie de acto poético, algo simbólico, una victoria pírrica, más que algo verdaderamente efectivo, en contra del monopolio comercial.

No hay comentarios.: